Tubo de acero inoxidable: una elección predominante recomendable en instalaciones eléctricas de industrias químicas y de alimentación
Una solución óptima contra la corrosión
El uso del tubo de acero inoxidable en las industrias químicas y de alimentación es preferible por sus propiedades excepcionales para entornos corrosivos. Es una solución segura, porque presenta una gran resistencia a la corrosión, es apropiado mecánicamente y presenta una larga durabilidad.
El acero inoxidable es un material no poroso y fácil de limpiar que es ideal para aplicaciones en la industria alimentaria, donde la higiene es de suma importancia.
Resistencia a la corrosión y resistencia mecánica
El acero inoxidable es una aleación de hierro, carbono y otros elementos como el cromo y el níquel, que le proporcionan esa gran resistencia a la corrosión.
El cromo en el acero inoxidable forma una capa en la superficie del material que protege contra la corrosión. De esta forma, se evita el contacto directo del metal con agentes externos que pueden ser una amenaza para la durabilidad y seguridad de la instalación eléctrica. A pesar de su resistencia a la corrosión, el acero inoxidable mantiene una excelente resistencia mecánica y eso lo hace adecuado para aplicaciones donde se requiere de una elevada resistencia mecánica.
Tubo de acero inoxidable; cumplimiento de normativas y estándares
He tubo de acero inoxidable cumple con los estándares de las instalaciones eléctricas en la industria alimentaria y está especialmente indicado su montaje en instalaciones de locales con características especiales incluidos en la ITC-BT-30 y 31, que garantizan su idoneidad para su uso en entornos con ambiente corrosivo. Este cumplimiento asegura la calidad y seguridad de las instalaciones y procesos.
Las instalaciones eléctricas en el sector químico y en el sector alimentario a menudo están expuestos a condiciones extremas, como altas temperaturas y alta probabilidad de impactos mecánicos. El tubo de acero inoxidable, por sus características mecánicas, protege los cables y conductores eléctricos contra impactos, garantizando un funcionamiento seguro y fiable incluso en los entornos desfavorables.
El uso del tubo de acero inoxidable garantiza la integridad de las infraestructuras eléctricas y contribuye a la eficiencia y fiabilidad de las operaciones en sectores industriales clave, como el químico o el alimentario.
En Armengol ofrecemos una amplia gama de tubos para instalaciones eléctricas que incluyen: sistema de tubo rígido electro galvanizado, sistema de tubo rígido galvanizado en caliente, sistema de tubo rígido inoxidable, sistema de tubo rígido PVC, sistema de tubo rígido LH, así como herramientas de roscado y otros sistemas complementarios.